Aseo de gatos mayores: por qué es importante

Las 5 lesiones más comunes de los caballos y cómo tratarlas
Durante la vida de cada caballo, es probable que ocurran lesiones en algún momento, tal vez incluso más de una vez. Esto es especialmente cierto para los caballos que son moderadamente activos, como los caballos de carrera y de exhibición, o los caballos de trabajo. Estas lesiones pueden ser bastante comunes y van desde lesiones menores hasta lesiones mayores. De cualquier manera, como propietario responsable de un caballo, debe conocer las lesiones más comunes y cómo tratarlas antes de que llegue el veterinario (si es necesario). #1 Pinchazos Raspaduras, cortes, pinchazos: estas son algunas de las lesiones más comunes que les ocurren a los caballos. Por lo general, son causados por objetos largos y afilados que pueden penetrar profundamente debajo de la piel. Por ejemplo, imagina una espina larga que perfora la pata del caballo mientras pasa por el arbusto, o un alambre afilado escondido en el polvo que se clava profundamente en el casco. Estas lesiones son difíciles de evitar, especialmente porque nunca se sabe lo que se esconde en la tierra o el césped. Pero puedes tratarlos. Y el tiempo es esencial en tal situación, ya que las heridas punzantes no tratadas pueden infectarse, dañar la pata del caballo y causar cojera. Tenga en cuenta que los pinchazos no son lo mismo que las barras. Pueden ser fáciles de ver ya que el agujero solo está marcado por una pequeña herida. Sin embargo, es difícil manejar tales heridas adecuadamente, a menos que seas un profesional. Debes llamar al veterinario de inmediato e intentar aliviar el dolor de la herida rociándola con agua fría. #2 Articulaciones inflamadas (osteoartritis) La inflamación de las articulaciones puede afectar tanto a los caballos mayores como a los jóvenes y, por lo general, se concentra en las partes conocidas como «ataúd», las articulaciones de los corvejones y los menudillos. Una forma común de que ocurra la inflamación es un aumento repentino en la carga de trabajo, así como ciertos movimientos que puede hacer un caballo, como saltos, giros cerrados, andares recogidos, nuevos pasos o cualquier otro movimiento inusual. Trabajar en terrenos rocosos difíciles durante largos períodos de tiempo puede provocar dicha inflamación. Las inflamaciones articulares pueden aparecer de forma repentina e inesperada y desaparecen rápidamente. Pero si sigue reapareciendo, puede convertirse en osteoartritis, que puede ser más difícil de curar. Los canales de inflamación de las articulaciones son sutiles, pero aún notorios: dificultad en el movimiento, movimientos rígidos y anormales, y luego hinchazón, calor y dolor. Esta condición requiere un examen veterinario cuidadoso, y un caso más leve de inflamación puede aliviarse con reposo en caja y tubería fría en las articulaciones inflamadas. #3 Dolor Todas las criaturas se ven afectadas por los músculos doloridos. Pero cuando los caballos se crían con tanta fuerza, pueden sentir esa enfermedad más que otros. Es cierto que el trabajo duro y el ejercicio desarrollarán los músculos, pero cuando trabaja demasiado a su caballo, pueden enfermarse. Los músculos tensos son dolorosos y pueden conducir rápidamente a lesiones más graves. Se ven comúnmente en los caballos y generalmente se enfocan en un grupo de músculos que están continuamente sobrecargados. Por ejemplo, es habitual en los caballos de doma, que se centran más en los cuartos traseros. El dolor muscular es una lesión común, pero se considera leve y sus síntomas pueden ser difíciles de ver. Tenga cuidado con los movimientos rígidos o evite ciertos ejercicios. Para tratar esta lesión, dale a tu caballo un tiempo libre para que descanse y se relaje, y trata de masajear los músculos afectados. Además, no se apresure a hacer sus ejercicios; déles tiempo para que se calienten. #4 Ligamentos constreñidos Los ligamentos son muy importantes en el cuerpo del caballo, y pueden ser distendidos por ciertos accidentes, especialmente en las patas traseras. Estas lesiones son causadas por pasos en falso, mayor estrés o aterrizajes bruscos. Por lo tanto, la lesión es más común en los caballos de exhibición que hacen saltos o caballos de doma. Además, una lesión de ligamentos puede variar de leve a grave, o en otras palabras, de una distensión a un desgarro. Esta es una lesión potencialmente grave, y un ligamento puede tardar meses y hasta un año en recuperarse. Por supuesto, la atención veterinaria es esencial y mucho descanso en todo momento. E incluso cuando el ligamento sane, su caballo deberá volver a la acción gradualmente con paciencia y cuidado. Para prevenir esta lesión, evite sobrecargar a su caballo o hacer ejercicio en terrenos irregulares e impredecibles. #5 Abrasiones Al igual que los pinchazos, la abrasión es quizás la lesión de caballo más común de todas. Suelen ocurrir en las piernas, especialmente en la parte inferior, y pueden ocurrir durante el trabajo o el ejercicio. Las abrasiones son variadas y pueden ir desde raspaduras hasta grandes cortes y cortes abiertos. Una forma común en que pueden ocurrir es el follaje bajo, los arbustos espinosos, las cercas de alambre de púas, las rocas afiladas y cualquier cosa intermedia. También pueden ser más leves o más graves, y dependiendo de esto, puedes tratarlos tú mismo o llamar a un veterinario. De cualquier manera, estos rasguños deberán limpiarse y desinfectarse, porque si no se tratan, pueden infectarse y causar más problemas.