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Cómo presentar a tu perro a un nuevo bebé

Haga que la primera reunión sea una ocasión feliz: algunos consejos sobre cómo presentar a su perro a un nuevo bebé

¿Quién es el nuevo cachorro sin pelo? ¿Por qué huele tan extraño? ¿Qué es ese ruido extraño que está haciendo? ¿Y por qué necesita tanta atención? Estas son algunas de las preguntas que haría tu perro si pudiera hablar cuando trajeras un nuevo bebé a tu casa.

Este es un momento emocionante para todos en la familia, incluido el perro, y desea asegurarse de que el perro y el bebé comiencen con el pie derecho. Como padres, tienen nueve meses para prepararse para esta presentación. Aproveche al máximo este tiempo para preparar a sus cachorros para la incorporación con estos consejos sobre cómo presentar a su perro a un nuevo bebé.

Ven primero sin el bebé: No has visto a tu perro en varios días, y no es de extrañar que esté emocionado de verte. Es una buena idea saludar primero sin el bebé para quitarse un poco de esa energía y entusiasmo. Una buena caricia y un masaje en la barriga pueden ayudar a calmarlo un poco antes de que llegue el bebé.

Mantenga la calma y haga las presentaciones: Es importante mantener la calma cuando entra a la casa con el bebé. Alguien debe tener el control del perro con correa y debe estar esperándote en otra habitación que no tenga acceso directo a la puerta principal. Estarás nervioso: quieres que esta introducción salga bien y que tu perro se dé cuenta de tus sentimientos. Hable en tonos uniformes y brillantes cuando salude a su perro. La persona que sujeta la correa puede sacar a su perro de la correa mientras usted se acomoda, se sienta y se pone cómodo. Tu perro no debe saltar ni tratar de oler tu nuevo color de alegría. Debería estar sentado al otro lado de la habitación, con una correa, cortésmente. Cuando responda con calma y cortesía, puedes elogiarlo y darle golosinas. Los niños deben ser vistos como cosas buenas, golosinas y cumplidos.

Conoce y Bendice: El primer encuentro y saludo puede ocurrir allí o más tarde; depende de usted, cuando se sienta cómodo. Cuando sucede, todos los detalles deben resolverse y la gente debe estar allí para ayudarlo. Debe ocurrir en una habitación tranquila, mientras está sentada con el bebé firmemente en sus brazos. Alguien más debe entrar en la habitación con el perro atado, con calma. Dirige a tu perro con voz tranquila, sé firme pero no te enfades, aunque haga algo mal. Cuando su perro se acerque a usted y al bebé, la correa debe estar floja pero corta. Mantenga su voz tranquila y suave mientras huele al bebé y recompénselo cuando lo haga con delicadeza. Mantenga las sesiones cortas para que el perro no se emocione demasiado y usted siempre tenga el control.

Establecer límites: Los límites de los que estoy hablando están alrededor de la guardería. Esta habitación debe estar fuera del alcance de su perro. Puedes poner una puerta para bebés que abra columpios o enseñarle a tu perro a entender que hay una barrera invisible. De cualquier manera, su perro no puede entrar a menos que le dé su permiso. Con el tiempo, puede dejar que un perro entre en la habitación mientras usted está allí para olfatear, pero asegúrese de que estas visitas estén programadas. Puedes comenzar esta práctica incluso antes de que llegue el bebé.

No sueltes a tu perro: ¿Tu perro es una manta? Tal vez sea porque no está recibiendo suficiente atención. Tienes que recordar, él era el bebé de la casa, ahora tiene un nuevo hermano con quien compartirlo. Tienes que tener en cuenta tanto como sea posible cuando estás cerca del niño y hacerlo sentir como parte de la familia. Las caminatas diarias con el cochecito de bebé son una manera fácil de salir de la casa para que ambos hagan el ejercicio que tanto necesitan.

Entrenando a su hijo: Cuando su hijo comienza a explorar su entorno, es importante enseñarle cómo interactuar con el perro. Debes supervisar todos los aspectos para garantizar el respeto, porque quieres asegurarte de que no juegue bruscamente con el perro, por ejemplo, tirando de su cola, tirando de su pelo, golpeando o pateando al perro, ¡o incluso usándolo como un juguete para la dentición! Debe comenzar a enseñar a su hijo lo antes posible, incluso si tiene el perro más paciente del mundo.

Ayuda adicional: Si cree que necesita ayuda adicional, no dude en traer las armas grandes. Contrate a un entrenador de perros profesional para ayudar a que esta transición sea fácil para todos los involucrados. Debes asegurarte de que tu hijo esté seguro, pero si no, prepárate para enfrentar el hecho de que quizás tengas que encontrar un nuevo hogar para tu perro para que tanto el niño como el perro estén seguros y felices en su entorno.

Este es un momento ocupado para usted, pero trate de apegarse a la rutina tanto como sea posible. Ayudará a su perro a acostumbrarse a la compañía y garantizará que pase un tiempo agradable con él. Con el tiempo, seréis una gran familia feliz y no podréis imaginar vuestra vida de otra manera.

Georgina

Ávida lectora. Ocasionalmente redacto textos informativos y llevo algunos blogs donde escribo artículos que pueden ser de utilidad para muchas personas. También tengo un gato que me acompaña e inspira ¡Su nombre es Billy!

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