Piensa en la vez que llevaste a Fido o Fluffy a casa por primera vez. ¿Fueron las cosas más lindas del mundo? Científicos en el Reino Unido han descubierto qué le da a nuestros amigos peludos el «Factor Awww», y probablemente lo hayas visto desde que eras un niño pequeño.
¿La capacidad de reconocer la ternura está escrita en nuestros genes?
Los investigadores de la Universidad de Lincoln en el Reino Unido ciertamente lo creen así. Y no es solo para adultos: los niños de hasta tres años pueden reconocer el factor ternura tanto en las personas como en los animales.
Probablemente no sorprenda a los amantes de los animales saber que los niños que participaron en este estudio calificaron a los cachorros y gatitos (bien… bebés) como más lindos que sus contrapartes adultas. Los investigadores dicen que esto está relacionado con lo que se llama un «esquema de bebé»: características juveniles como una cara redonda, frente alta, ojos grandes y una nariz y boca pequeñas. No es algo consciente, pero cuando vemos elementos de este tipo, internamente se nos aconseja ser cariñosos y protectores; en adultos la aparición de estos rasgos incluso reduce la agresividad. Los científicos saben desde hace mucho tiempo que el esquema de un niño tiene un efecto poderoso en los adultos, pero esta es la primera vez que se observa en niños.
Entonces, ¿cómo lo descubrieron? Les mostraron a los niños conjuntos de fotografías (como la de arriba) de bebés, cachorros y gatitos y sus contrapartes adultas, luego rastrearon sus movimientos oculares para ver qué áreas de la cara atraían más a los niños. También se les pidió que calificaran las imágenes de perros, felinos y humanos según su ‘ternura’. Los investigadores hicieron las cosas aún más interesantes mediante la manipulación digital de imágenes de perros, gatos y personas para hacerlos más lindos (características más grandes) o menos lindos (características más estrechas).
Los niños no solo calificaron a los cachorros, gatitos y bebés como más lindos que sus contrapartes adultos, sino que los perros adultos fueron calificados como más lindos que los gatos adultos y los humanos. ¡Los amantes de los perros se regocijan! (Pero los gatos también son geniales. ¿La gente? Lo son, si me preguntas).
Tan divertido como podría ser estudiar ‘ternura’ todo el día, los estudios tendrán un impacto en el mundo real. Se llevarán a cabo más investigaciones para determinar si el supuesto ‘factor lindo’ de los perros anula la capacidad de los niños para reconocer signos de estrés en nuestros compañeros caninos. Los investigadores también observarán cómo la ternura percibida de un animal puede afectar su capacidad para ser adoptado de un refugio de rescate.
[Source: Daily Mail]
